La coordinadora de Vente Venezuela en Valencia, María Teresa Morín, denunció que la crisis en los servicios públicos continúa agravándose en plena pandemia, lo que mantiene a los venezolanos condenados y atrapados entre la incertidumbre y las pésimas políticas gubernamentales.
En nota de prensa, la dirigente del partido de María Corina Machado, cuestionó que las colas por gasolina y gasoil, así como los apagones, han vuelto a la entidad carabobeña, a lo que se suman las permanentes fallas en el suministro de agua potable y la escasez de gas, “todo ello en medio de una nueva semana de cuarentena improvisada que inicia hoy en todo el país”.
A su juicio, los venezolanos hoy están condenados a permanecer en sus hogares con apagones de varias horas, un suministro irregular de agua potable, sin gas y ahora sin gasolina. “¿Cómo se puede cumplir un confinamiento si en los hogares no contamos con servicios básicos de calidad?”, cuestionó.
Añadió que lo que viven los venezolanos “no es más que una declaración de guerra de Nicolás Maduro al país. No hay precisión sobre la llegada de todas las vacunas necesarias, no garantizan ni siquiera el agua que es fundamental para la higiene y evitar la propagación del Covid-19 y ahora tampoco son capaces de garantizar la energía eléctrica ni el combustible, mientras que ellos se aferran al poder sin importarles la vida de los ciudadanos”, dijo.
Condenó que mientras todo esto ocurre, Maduro se empeña en ahorcar a los medios de comunicación, como se evidencia con las sentencias en contra de El Nacional y Radio Rumbos, al tiempo que promueve sanciones y persecución a los ciudadanos que salen día a día a intentar conseguir el sustento para sus hogares, o a las empresas que luchan por subsistir.
“Estamos ante un Estado fallido, que permite que bandas armadas se apoderen de zonas como la cota 905 en Caracas o Las Palmitas en Valencia. La crisis se agudiza mientras nuestros ciudadanos huyen o mueren”, insistió.
Por ello, reiteró el llamado a la organización a incrementar la presión junto a la comunidad internacional para lograr la entrada inmediata de ayuda humanitaria al país “y la salida del poder de quienes tienen a Venezuela condenada a un precipicio”.
