Expertos en el clima temen que nuevas inundaciones y vientos huracanados afecten la provincia italiana de Catania, en la isla de Sicilia, donde ya hubo dos muertos por el temporal.
Por el momento no llueve en la provincia italiana de Catania, en el este de la isla de Sicilia, pero los habitantes se preparan para nuevas lluvias destapando los sumideros y las calles de barro y desechos, y controlando las cañerías.
El peligro de nuevas tormentas sigue vigente y las escuelas y establecimientos en Catania permanecerán cerrados, a la espera del nuevo fenómeno climático, aunque con la esperanza de que no se repita con la violencia de los últimos días. Sin embargo, los meteorólogos pronostican esta vez vientos huracanados, además de fuertes lluvias.
El 26 de octubre dos hombres murieron y una mujer está desaparecida desde entonces a causa de las lluvias torrenciales que azotan la provincia italiana de Catania, en la isla de Sicilia (sur), que sigue en gran parte en alerta roja por el temporal.
La tormenta, que duró varias horas, se cobró la vida de un hombre de 53 años en la localidad de Gravina di Catania, en las faldas del volcán Etna, según informan los medios locales.
Diario La Verdad