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Salud mental sin medicamentos

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Columna: Mejor Vivir

(Por: Arnaldo Rojas/Funcamama)

*Se ha impuesto la creencia que es imposible tratar las afecciones mentales sin tomar medicamentos. Sin embargo, un proyecto médico en marcha está demostrando que sí es posible  una alternativa diferente y más humana en el tratamiento y curación de dichos trastornos.

En la sociedad actual, prácticamente todas las “enfermedades” mentales suelen ser tratadas mediante fármacos, sin importar cuál sea su grado y mucho menos cuáles son sus particularidades, de acuerdo a la historia de vida de la persona afectada.

La forma tradicionalista de entender los conceptos de salud y enfermo, medicina y bienestar, entre otros, trae como resultado la creencia de que todos los seres humanos pueden ser tratados de la misma manera y que, por ejemplo, una depresión es idéntica en una mujer de 50 años que en un adolescente de 16; en un hombre que perdió a su esposa o en una joven despechada que no puede dormir de noche. Y bajo esa premisa, a todos se les ofrece la misma solución: un fármaco cuya promesa es devolverlos a la normalidad, lo que sea que esto signifique. Este enfoque de la salud mental es tan dominante que pensar en otras alternativas se considera un exabrupto, un pensamiento descabellado o una charlatanería.

Sin embargo, en Noruega se inició un proyecto que busca demostrar la factibilidad de otra alternativa. Es decir, que sí es posible abordar la salud mental y psiquiátrica sin el enfoque farmacológico que la ha dominado en los últimos 50 años.

En la remota ciudad de Tromsø, en el norte de la península escandinava, se encuentra el Hospital Psiquiátrico Universitario de Åsgård que, desde la entrada, anuncia su particularidad: “Tratamiento libre de medicamentos”, consigna impulsada por el propio Ministerio de Salud del país y que, entre otros propósitos, busca explorar otras formas de tratar la mente y sus trastornos. ¿En qué consiste esta otra alternativa? La respuesta es simple y breve: en escuchar a la persona afectada.

La Dra. Merete Astrup, directora de la institución, describe así la particularidad de esta perspectiva: Es una nueva forma de pensar. Tradicionalmente, cuando las personas buscan ayuda, siempre se le brinda a partir de un esquema de tratamiento pre-establecido, no de aquello que las personas quieren. Estamos habituados a decir a las personas afectadas: “Esto es lo mejor para ti”. Pero ahora les decimos: “¿Qué quieres en realidad?”. Y ellos pueden decir: “Soy libre. Puedo decidir”.

“Tenemos que considerar que la perspectiva de la persona que va a recibir tratamiento es tan valiosa como la del médico. Si las personas dicen que esto es lo que queremos, para nosotros está bien. Se trata de ayudar a las personas a que sigan adelante con sus vidas, de la mejor forma posible, y nosotros debemos ayudarlas a seguir. Si quieren pueden seguir tomando su medicamento o pueden intentarlo sin tomarlos. Hemos podido comprobar que sí es posible superar sus afecciones sin tomar fármacos. De hecho, la gran mayoría de nuestros pacientes no reciben tratamiento farmacológico y quienes lo reciben, al ver el resultado favorable en los demás, cambian de terapia”, afirma la especialista.

Este testimonio de la Dra. Astrup expresa con sencillez el principal problema de la psiquiatría moderna: el lugar secundario al que relegó la historia de la persona, para centrarse en una visión standarizada de lo que se considera “el paciente”.

Por más que el enfoque cientificista parezca inapelable, lo cierto es que los trastornos mentales no son exclusivamente resultado de desequilibrios neuroquímicos.  La locura, la depresión, la ansiedad y otros trastornos son usualmente síntomas en los que se condensan circunstancias de nuestra vida que no entendemos o aún no hemos explorado. Dicho de otro modo: no hay dos personas en el mundo que estén tristes por la misma razón. Sin embargo, a ambos individuos se les ofrece la misma solución: un antidepresivo. El nuevo enfoque de la mente humana busca entender las razones personales de cada quien. De hecho, la Psiconeuroinmunología es una novedosa disciplina médica que estudia como un evento estresante de orden físico, ambiental o emocional induce una respuesta fisiológica alterada, afecta nuestro sistema inmune y nos expone a contraer enfermedades de alto riesgo.

Por ahora,  el proyecto puesto en marcha en Noruega se encuentra en fase experimental. No obstante, el solo gesto de escuchar a la persona con una condición psiquiátrica y considerar su historia particular es, para los médicos que los tratan, un gran paso cuya dirección podría ser quizá un entender la salud y el bienestar como estados que manan directamente de la subjetividad y las circunstancias personales y sociales, abriendo el camino hacia una salud mental libre de fármacos.

Ilustración: Glen Le Fevre, Australia

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