Neha Paswan, de solo 17 años, ha perdido la vida en la India después de que su familia la asesinara por no respetar los atuendos tradicionales. La golpearon hasta dejarla gravemente herida y después la dejaron colgada en un puente cuando iban supuestamente a llevarla a un hospital.
La adolescente vivía en Savreji Kharg, una de las aldeas más atrasadas de Uttar Pradesh, al norte de la India. Constantemente recibía toques de atención por parte de sus familiares por no llevar un ‘sari’ o al menos una blusa larga tradicional. De hecho, la presionaron para que dejase la escuela si seguía yendo con ropa «atrevida» como así lo calificaban.
Las reprimendas llegaron a más y la adolescente recibió una paliza de muerte por parte de su abuelo y de sus tíos. Neha se encontraba gravemente herida y los autores de la agresión engañaron a la madre, haciéndola creer que la llevaban al hospital. En lugar de eso, la dejaron colgada de un puente, donde sería encontrada días después.
La autopsia revelaba que la joven de 17 años tenía roto el cráneo por los golpes y su madre ya ha denunciado los hechos. Hasta el momento, cuatro personas han sido detenidas: el abuelo, dos tíos y el conductor que les llevó con el cadáver de la joven.
Con datos de ABC de España
